Amarás a tu
prójimo como a ti mismo. (Marcos 12: 31), muchos piensan que cumplen con este versículo
a la perfección , pero pensemos, muchas de nosotras pasamos todo el día
evangelizando, ayudando a los demás tanto como sea posible, orando y ayunando
por el pueblo y todos los días en la iglesia dando todo nuestro tiempo y
energía ¿no es así ?,pero… ¿qué pasa con nosotras? Si leen de nuevo amigas,
verán que este mandamiento no es sólo acerca de la personas. Vamos a entender, debemos
amar a las personas como nos amamos a nosotras mismas, cierto! Ahora, piensen conmigo
... Si no nos amamos a nosotras mismas, realmente, no amamos a los otros!
¿Cuántas
mujeres se tratan como nada? Solo teniendo tiempo libre muchas piensan que es
suficiente. Pero que tiempo libre tenemos en estos días? Esta ha sido la excusa
para que muchas no se cuiden, no coman saludablemente, no tengan tiempo para
arreglarse, no tienen tiempo para sí mismas, ellas vive a la carrera. ¿Y sabes
lo que pasa?
Ellas se
vuelven estresadas! Pueden estar en todo
lugar pero al mismo tiempo en ninguna parte, ellas no pueden ver nada de
lo que está justo en frente, son ciegas a las necesidades reales de las
personas, están muy concentradas para ver lo que Dios quiere de ellos y es una
pena, y sabe por qué? Puede servir a Dios sin su salud? Puede ser una buena
esposa, ama de casa, madre, hija, compañera de trabajo, esposa de pastor,
obrera o sierva de Dios sin su salud y la paz de espíritu? Por supuesto que no
amigas!
Otra cosita
: si no puede servir a las personas de su casa, usted cree que puede servir a
aquellos que son desconocidos?
Hoy se
dedicará a usted!
Si usted
necesita ejercitar su cuerpo lo irá a comenzar, si tiene tiempo para todos y no
para usted, se organizará y hará un tiempo para que usted tome el cuidado de sí
misma y así sucesivamente. Pídale a Dios que le muestre lo que necesita hacer
para usted misma y usted va a actuar. Si usted se ama (se cuida), naturalmente
amara y cuidara a su prójimo, ¿lo entendió?
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